RECORD NACIONAL SALTO NOCTURNO EN GRUPO DE SEIS, AEROPUERTO DE EZEIZA, 12-MARZO-1971
El grupo estuvo integrado por los paracaidistas Renato Beccari (italiano), Gustavo Pérez, Armando Agosta, Alfredo Rosi, Carlos Alejo Russo, Alfredo Albertengo y Héctor “Toto” Gerling.
En el libro de lanzamientos de Toto Gerling tiene registrado el salto número 709, con 68 segundos de caída libre. El lanzamiento fue en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, el 12 de marzo de 1971.
Actuaron como fiscalizadores de la prueba el Juez FAI Tomás D. Berriolo y el Juez FAP Antonio Román.
Aproximadamente a las 21 horas de 11 de marzo, se reunieron en una sala del aeropuerto, los paracaidistas junto a los jueces y pilotos, para ultimar detalles referidos al lanzamiento.
Lo simpático y agradable, fue la presencia de una gran cantidad de paracaidistas, amigos, novias y parientes que concurrieron para alentar y apoyar a los deportistas.
Una vez aclarados todos los pormenores tendientes a superar cualquier inconveniente que pudiese surgir en el desarrollo del salto, y finalizada la coordinación para el embarque de la aeronave, se procedió a los preparativos finales.
Acordado el turno de abandono de la máquina, de la metodología de utilización periódica del oxígeno disponible a bordo y determinar el lugar de reunión luego del aterrizaje, el grupo se puso a disposición de los jueces del evento.
El Juez FAI en tierra, señor Tomás Berriolo, convalidó la documentación de cada participante y registró en planillas oficiales todos los datos para validar el intento de establecimiento de esta marca nacional nocturno en grupo de seis integrantes.
Mientras tanto, el juez FAP Antonio Román, ofició de juez a bordo mediante un barógrafo sellado y asimismo controlando el botellón proveedor de oxígeno.
La aeronave era un bimotor Beechcraft AT-11 matrícula LV-GEV, propiedad del piloto Hugo Antonio Albaini, basado en el Aeropuerto Internacional Don Torcuato.
Aproximadamente a las 23.45 del 11 de marzo se procedió al embarque y el despegue fue a las 00:08AM del 12 de marzo. Los paracaidistas, los pilotos y el juez de a bordo Antonio Román.
Cuando la aeronave estaba en vuelo de ascenso, se observó hacia el oeste en dirección a la localidad de Cañuelas, la presencia de un frente de tormentas bastante grande. Se veían potentes descargas eléctricas.
La corrida final del vuelo para el lanzamiento, era justamente hacia esa tormenta y el abandono de la máquina se llevaría a cabo pasando el aeropuerto. A criterio de los paracaidistas esa tormenta estaba muy lejos de perturbar el vuelo, pero el piloto no se animó a encarar la corrida final del lanzamiento.
El piloto no quiso sobrevolar el aeropuerto de Ezeiza y menos en dirección a la tormenta. El vuelo demoró cerca de una hora y media antes del salto, el que se hizo aproximadamente a la 01:45AM del 12 de marzo de 1971.
Se cree que a causa de la demora en el vuelo, los paracaidistas fueron levemente afectados por la hipoxia. Toto Gerlig comentó haber utilizado un paracaídas Para-Commander MK-1 y un reserva también Pionner de 24 pies.
Finalmente, los paracaidistas aterrizaron tan lejos y dispersos, que el Equipo de Búsqueda y Salvamento del aeropuerto logró buscar a varios paracaidistas, y otros que aterrizaron más lejos llegaron al aeropuerto por distintos medios, ya siendo de día.
Según el registro del Juez de a bordo el lanzamiento se realizó de una altura de 4.240 metros. Allí la temperatura era de menos 16ºC, cuando en superficie era de casi 20ºC.
El AT-11 aterrizó a las 02:08AM, es decir dos horas después del despegue y a 28 minutos del lanzamiento. Historia de una feliz aventura…que bien vale la pena recordar luego de 49 años, casi medio siglo de acontecido.
(Del blog del CAP, sobre un relato de Héctor “Toto” Gerling)
Comentarios
Publicar un comentario