Recordando el 2º Campeonato Latinoamericano

Diez puntos es la calificación que merecieron los tripulantes del DC-3 del INAC por la sobresaliente tarea desempeñada. De izq. a der.: Marcelo Garcia Peret, Julio Martini, Walter Molina y Jorge Lozano. Faltan en la foto Héctor O. Longo y Fortunato Barrios.

Del 12 al 20 de noviembre de 1988, en el Aeródromo Coronel Olmedo de la ciudad de Córdoba, se desarrolló esta competencia internacional que contó con la presencia de diez países. Gustavo Pascutti (Argentina) y Orffa Villanueva (Perú) se clasificaron campeones en las individuales. Argentina ganó la competencia por equipos y Brasil la de trabajo relativo secuencial. El equipo de España se hizo acreedor a la "Copa Hispanoamericana 1988".

 24 horas antes del inicio, un huracán volteó árboles, cortó las comunicaciones y el suministro de electricidad, "planchó" mástiles y antenas, reventando la carpa grande de CADEA, doblando gruesos caños metálicos y desarmando todo lo que tanto trabajo había costado levantar en el aeródromo.
Tan solo la experiencia de los responsables y el espíritu de sacrificio de quienes se unieron para  "sacar adelante" el campeonato posibilitó que el domingo 13 a las 8 de la mañana - luego de una noche entera de febril tarea - el escenario estuviese nuevamente preparado, como si nada hubiera ocurrido.

Se presentaron equipos de Argentina, Brasil, Chile, España (invitado especial), Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. en total se inscribieron 60 competidores varones, 9 mujeres, 3 cameramans en caída libre, 11 jueces y 13 delegados. para completar el panel de juzgamiento; el organizador aportó 8 jueces nacionales, 4 técnicos y 4  computistas.

Un Douglas DC-3 del INAC permaneció durante toda la competencia y los elogios que intentemo sobre el trabajo desplegado por su tripulación, seguramente harán que nos quedemos cortos. Una tarea sobresaliente. Se completó la dotación con un Douglas DC-3 de Villa Reinolds.

Se dispuso además de varios aviones de pequeño porte facilitados por  clubes afiliados a la FAP, según detalle (entre paréntesis el nombre de los pilotos actuantes): Cessna 206 del Club Escuela de Paracaidismo Pergamino (Medardo Andrade); Cessna 206 del Aero Club San Francisco (Roberto Ribotta y Fernando Morán); Cessna 185 del Club de Paracaidistas Santa Fe (Gabriel Saranz); Cessna 185 del Club Argentino de Paracaidismo (Eduardo González); Cessna 182 del Centro de Aviación Civil San Juan (Roberto Mugnani); Cessna 182 del CEPAC Paracentro. De más esta decir que también en estos casos pilotos y aeronaves cumplieron una labor descollante.

Para completar el panorama, se dispuso durante un día completo de un Fokker F-27 de la Fábrica Militar de Aviones. En un momento determinado, contabilizando todo el personal aeronavegante, solo en ese rubro se totalizó la cantidad de 37 personas.

(Publicado en la revista  "AERODEPORTES" de Enero de 1989)